La 6ª convoactoria del concurso Racons Públics Castelló trata la Plaza de la Constitución.
La trama urbana que se extiende al sur del centro histórico de Castellón conforma uno de esos ensanches menores de retícula homogénea y dimensiones ajustadas que produce un tejido urbano y social de cierta intensidad. Este modelo de ciudad, que se repite en casi todo el mediterráneo, tiene algunas virtudes: La compacidad es una fuente de cohesión social e intercambio económico y cultural, de vida de calle y de comercio en planta baja. La regularidad de la trama permite una movilidad fluida de bienes y personas, de convivencia entre el coche y el viandante. La contigüidad al centro histórico hace de este pequeño ensanche un lugar privilegiado, de oportunidad. La variedad de la edificación en sus intervías proporciona momentos de diversidad en la homogeneidad de la malla.
En este tipo de tejidos urbanos resultan especialmente importantes las plazas, como lugares excepcionales de reunión, y espacios de oportunidad para el crecimiento del verde, árboles y actividades que no caben en otro lugar del barrio.
La plaza de la Constitución debería ser uno de esos lugares, pero en su estado actual no consigue ejercer plenamente como plaza pública.
La primera impresión es de un estado general de deterioro. Parterres sucios y secos. Un pipi-can de dimensiones insalubres. Aceras y pavimentos al borde de la peligrosidad. Mobiliario obsoleto. Mala iluminación. Vegetación desatendida.
Una mirada más abierta detecta tres calles sin salida en el lado norte. Estos callejones, usurpados por media docena de automóviles oportunistas, contenedores, salidas de ventilación del aparcamiento subterráneo y otros objetos de difícil justificación, se encuentran cerrados por un muro blanco de tres metros.
Detrás del muro se halla una cancha deportiva vinculada a la sede administrativa del Instituto Valenciano de la Juventud.
Está claro que un proyecto integral de reforma excedería en mucho los 180.000 euros que las bases de Racons Públics aconsejan para cada emplazamiento. El interés del lugar nos impulsa, no obstante, a proponer la Plaza de la Constitución como sexto Racó Públic de esta primera edición del concurso en Castelló. Creemos que no es el momento de los proyectos ambiciosos y generalistas: es la ocasión de utilizar los escasos recursos disponibles con precisión económica, calidad artística y rentabilidad social.
El concurso «Racons» es público y abierto a todo el mundo, individualmente o por equipos. Las convocatorias se harán públicas en el diario «Mediterráneo» y en la web de «Racons» el primer domingo de cada mes, de octubre a junio. Cada convocatoria estará dotada con un premio de 1.251 €. Habrá dos jurados. Un primer jurado de preselección elegirá cuatro proyectos de cada convocatoria mensual y un gran jurado final elegirá, entre las 32 propuestas finalistas, los 8 ganadores.
El plazo de entrega de los proyectos de esta nueva convocatoria vence el día 31 de mayo a las 12.00 h.
+ info en www.raconspublicscastello.com y www.eacc.com
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